Julia Wendell dejó a todos en la boca abierta al asegurar que es Madeleine McCann, la pequeña del Reino Unido que desapareció el 3 de mayo de 2007 desde la zona de Algarve de Praia da Luz, en Portugal.
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La joven polaca, que también se hace llamar Julia Faustyna, creó una cuenta de Instagram donde aseguró ser Maddie y solicitó la ayuda de las redes para iniciar una batalla mediática y lograr que los padres McCann hagan una prueba de ADN.
La prensa británica ha especulado con que los padres de la pequeña estarían dispuestos a realizarse la prueba y disipar toda duda, pero hasta ahora nada se ha materializado.
De mal en peor
Más allá de la postura de los padre de Madeleine, los especialistas le han dado la espalda a la versión de la joven polaca de 21 años, tres años mayor de lo que tendría Maddie.
Primero fue Francisco Marco, detective especializado que trabajó en el caso McCann y que fue contratado por la familia.
Luego fue el turno de Scotland Yard. La policía metropolitana de Londres desestimó la historia de Julia, pues sus indagaciones apuntan que Madeleine fue asesinada el mismo día en que fue secuestrada.
Otro institución que descartó de plano la teoría de la joven fue la policía polaca, que fue tajante.
"La actuación de los policías de la Jefatura Provincial de Policía en esta etapa contradice la versión presentada por esta mujer. Las actividades están en curso, pero ya se puede descartar que esta versión sea cierta", sentenció la policía de Breslavia, Polonia.
Pero el golpe más duro para Julia vino de su propia familia, que desestimaron la versión de la joven. Es más, aseguraron que solo buscaba fama al afirmar que Julia "miente y manipula".
El no de su familia
En un principio, el círculo familiar de la mujer polaca optó por el silencio, pero ante el crecimiento de su batalla mediática, donde suma más de 1,1 millón de seguidores en el perfil de Instagram, la Familia optó por pronunciarse.
Pese a que el círculo familiar de la joven polaca tomó clara posición entre los detractores de su historia, no están dispuestos a todo.
Julia ha sido majadera en solicitar exámenes de ADN para despejar las dudas sobre sus orígenes, sim embargo, su familia se ha negado a esta petición.
La justificación para evitar esta prueba es que ellos cuenta con un certificado de nacimiento de Julia Wendell.
Aquí es donde entra a tallar Fia Johansson, una mujer que se identifica como psicóloga, medium e investigadora privada. De hecho, ella aseguró que Maddie aparecería viva en 2023, hace cuatro años.
Fia también figura como representante de Julia y aseguró que "queremos ser muy respetuosos con la familia McCann y respetar su privacidad y la de sus hijos, mientras no sepamos exactamente quién es Julia", según informa Cronista, de Argentina.
Fia afirmó que se debería "obligar a la madre o a un miembro de la familia de Julia a hacerse la prueba, en lugar de perturbar la paz de Kate y Gerry (McCann), lo cual no es necesario".
Julia explicó que "si un miembro de la familia actual se hiciera una prueba de ADN, podríamos resolver esto. Pero se niegan a hacerlo", aseguró Cronista.
La publicación argentina detalló que Fia aseguró que la familia no no deseaba el examen pues lo encontraba innecesario.
El portal detalló que "el motivo por el cual la madre y el padre de Julia no quieren hacerse una prueba de ADN es porque ella dice que tiene el certificado de nacimiento. Para ellos es una prueba más que suficiente para demostrarle el vínculo y lazo familiar a su hija".
Las claves
- Julia Wendell busca que su familia o los McCann se hagan pruebas de ADN para aclarar sus dudas sobre sus orígenes, después de asegurar que es Madeleine McCann.
- La familia de la joven polaca, sin embargo, descartó realizarse la prueba, pues la considera innecesaria.