Mikaela Testa, de 23 años, es una popular influencer con 2.300.000 de seguidores en TikTok y más 700.000 fans en Instagram. La joven australiana inició la semana agitada luego que se confirmara que mintió a sus fanáticos por un año.
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La modelo australiana reconoció en su cuenta de TikTok que se había cometido a una cirugía estética. Puntualmente se hizo un levantamiento de glúteos al estilo brasileño.
El portal australiano News infirmó que "Mikaela Testa, de 23 años, negó continuamente que se haya sometido a una cirugía estética para mejorar su figura después de que se especulara que se había sometido a un levantamiento de glúteos brasileño (BBL)".
Testa negó sistemáticamente un paso por el quirófano ante las constantes preguntas y comentarios de sus fanáticos.
La operación que se realizó la influencer no es considerada cualquier intervención estética, pues según da cuenta News "el procedimiento se anuncia como 'el más peligroso del mundo' debido a que una de cada 3.000 operaciones realizadas resulta en la muerte".
"transferencia de grasa a las caderas"
La maniquí "admitió que tuvo 'dos rondas' de la controvertida cirugía estética, así como una 'transferencia de grasa a las caderas' mientras aparecía en el podcast White Fox After Hours", aseguró la publicación oceánica.
La confesión de Testa generó una ola de críticas entre sus fans, al punto que la modelo optó por aclarar la situación en su video en TikTok, claro que sus dichos no ayudaron mucho en bajar la polémica.
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"Durante todo un año, les dije a todos mis seguidores que mentía sobre tener un BBL, les dije a todos mis seguidores que no me había hecho una cirugía plástica cuando en realidad solo estaba mintiendo", reconoció.
Para complacer a un novio
Testa agregó que "es una de las cosas más repugnantes que he hecho en toda mi vida, y paso todos los días lamentando y tratando de revertir el daño que me he hecho, no solo a mí misma, sino que a todas las jóvenes que me siguen".
La modelo explicó fue la razón que la llevó a realizarse esta peligrosa operación y ahí, los seguidores reaccionaron aún más molestos, pues todo se limitó a satisfacer a una pareja.
El hombre con que Testa tuvo una relación "le gustaba, compartía y volvía a publicar repetidamente fotos de estas chicas que se habían sometido a estas cirugías, especialmente BBL".
Inseguridad y aumento de peso obligado
Esta actitud detonó una tremenda inseguridad en la modelo, que la llevó al quirófano, explicó.
"Al igual que cualquier chica, te preocupas, te inseguras y empiezas a mirarte de otra manera. Un millón de cosas comienzan a pasar por tu mente, y de repente quieres hacerte un BBL", aseguró.
Testa detalló el drama que vivió para poder realizarse la intervención, pues en "en el consultorio de un médico" le dijeron que "no tenía suficiente grasa corporal para la cirugía".
"Entonces, aunque esta es una cirugía loca que pone en peligro la vida, de la que mueren mujeres cada año, mis inseguridades me llevaron a un problema que podría poner en riesgo mi vida", reconoció.
"Comía McDonald's en la cama junto a mi novio todas las noches justo antes de irme a dormir solo para subir de peso y ser lo suficientemente buena para él", y enfatizó que estaba "en mi mente" porque su ex nunca le pidió que se sometiera al procedimiento.
La razón de la mentira
Después de abrirse y narrar cómo se gestó la operación, Testa reveló por qué mintió. Y la razón fue evitar ser juzgada por los "pensamientos tóxicos" que la llevaron al quirófano.
"Esa es mi razón para mentir. Me sentí avergonzado. No solo estaba insegura, sino que también estaba insegura sobre si era necesaria la operación".
Las revelaciones de la influencer tuvieron diferentes reacciones. Muchos la criticaron por haber mentido, otros pusieron el foco en que la operación solo pasó por complacer a una pareja y también hubo quienes valoraron la valentía que tuvo la maniquí para reconocer la falta y ofrecer disculpas a sus fanáticos.
Las claves
- La influencer Mikaela Testa mintió sobre una operación estéticas durante un año a sus más de dos millones de fanáticos.
- La modelo de 23 años reconoció la falta y reveló que la intervención se de vio por una expareja y sus inseguridades.
