Julia Wendell Faustyna revolucionó las redes y también los medios de comunicación cuando creó un perfil en Instagram en que aseguró ser Madeleine McCann, la niña del Reino Unido que desapareció el 3 de mayo de 2007, desde la zona de Algarve de Praia da Luz, en Portugal.
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Julia es polca, de 21 años, mientras que Maddie tendría 19 en la actualidad, sin embargo, la mujer llenó el perfil de "pruebas" que respaldan su teoría de que es la pequeña británica.
Las pruebas que ha dado a conocer son básicamente fotos en que muestra similitudes con Madeleine, pero nada concluyente. Al punto que tanto Scotland Yard como la policía polaca descartaron la versión de Julia, precisamente por no tener mayores argumentos.
Pero el perfil de la mujer polaca sigue sumando seguidores, llegando ya a más de 1,1 millón.
Su familia le da la espalda
El polémico caso, sin embargo, ha tomado un camino nuevo: el enfrentamiento abierto entre la joven y su familia.
El círculo familiar de la mujer polaca definitivamente le dio la espalda y descartó de plano su versión de ser Maddie.
En un comienzo aseguraron que la joven "miente y manipula", pero luego endurecieron su discurso y hablaron de sus problemas psicológicos.
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"Siempre hemos intentado entender las cosas que le estaban pasando a Julia. Terapias, medicación, psicólogos y psiquiatras. Sus amenazas, sus mentiras y manipulaciones hacia nosotros, sus acciones en internet... Hemos tratado de prevenirlo (...) Se mudó, no quiere tomar su medicación. Se negó a que le trataran en uno de los mejores hospitales psiquiátricos de Polonia", aseguró la familia en un comunicado que toma La Vanguardia, de Barcelona.
El contraataque
En respuesta, Julia contraatacó... Fia Johansson, una mujer que se identifica como psicóloga, medium e investigadora privada y que también es la representante y vocera de la joven polaca, hizo una impactante revelación que siembra dudas sobre la familia de Julia.
"Lo que descubrimos después de investigar un poco esto es que escuchó a su madre decir algo como 'No sé por qué tenemos a esta chica, siempre ha sido una alborotadora desde que la llevamos", aseguró la medium, quien curiosamente en 2019 vaticinó que Maddie aparecería viva en 2023.
Para la familia de Julia, la joven miente y manipula, pues ella vio fotos de cuando era pequeña, pero que se llevó cuando se fue de casa.
Otro aspecto de la vida de la mujer polaca que ha salido a la luz es que creó varios perfiles en páginas de contenido de adultos, algo que según la prensa europea ahora ha intentado borrar.
Contenido para adultos
La Vanguardia aseguró que "crecen las evidencias del ansia de la joven por hacerse famosa".
En su intento por lograr notoriedad, Julia pasó por varias etapas: "Un periplo que, antes de saltar a los tabloides sensacionalistas tratando de usurpar la identidad de la pequeña Maddie, la llevó a iniciar una etapa artística como cantante, otra como modelo y, finalmente, una tercera como creadora de contenido erótico".
La publicación catalana explicó que Julia "se había abierto varios perfiles en un puñado de webs para adultos. Aunque, al igual que ha ocurrido con el de twitter, todos ellos han sido ha cerrados para tratar de borrar una huella digital que lastraría sus intereses".
El portal agregó que "el hecho de contar con canales propios verificados en webs como Pornhub implica, según desvela El Mundo, que la joven tuvo que aportar para ello un pasaporte o el equivalente polaco al DNI (carnet de identidad)".
Y es ahí el punto importante, porque para tener pasaporte o DNI (carnet de identidad), se tuvo que contar con la documentación que según la mujer polaca, nunca conoció.
La Vanguardia pone el acento en este punto: "El dato relevante aquí radica en que sendos documentos únicamente pueden expedirse tras aportar una partida de nacimiento que acredite los datos. Lo cual choca frontalmente con la estrategia de Julia quien, para hacerse pasar por Madeleine McCann, denunció que sus padres nunca 'le habían permitido ver' esa documentación".
Otro golpe para la versión de Julia, quien dice ser Maddie, una historia que cada día se ve más débil.
Las claves
- Julia ha borrado varios perfiles de contenido para adultos y también una cuenta en Twitter.
- Lo llamativo es que si creó perfiles verificados de portales como Pornhub debió contar con pasaporte a DNI, y para obtener esos documentos tuvo que contar con partida de nacimiento.
