En 2017 fallecía Hugh Hefner a sus 91 años, rodeado de conejitas, admiradores y familiares Hugh Hefner, tras haber forjado un imperio multimillonario impulsado por el sexo, fiestas llenas de desnudos (de mujeres) y orgías al tratarse del dueño de Playboy.
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Sin embargo, el empresario logró escapar de la justicia que ha impuesto el movimiento Me Too ante los abusos que perpetraba y que lo hacían cada vez más ricos, como lo fue su matrimonio con Crystal Hefner, quien era 60 años más joven que él.
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La mujer que calló por tanto tiempo al tenerlo prohibido por el empresario, rompió el silencio y relató el calvario que vivió junto a su esposo.
"Di solo cosas buenas" es el título que le dio a sus memorias que saldrán en enero de 2024. Sin embargo, ella ha concedido algunas entrevistas donde ha hablado de lo vivido.
Las escalofriantes declaraciones de la viuda de Hugh Hefner
Crystal Hefner intentá dejar atrás su pasado para vivir la vida ante las prohibiciones a las que la sometió el magnate al tenerla bajo su poder, quien la arrastró a dormir con personas que ni siquiera conocía y le prohibía viajar y ni siquiera salir de casa.
"No conocía a la mayor parte de la gente que había en nuestro dormitorio, que era mucha. Horrible. Era como: ‘Venga, ahora te toca a ti’. En realidad nadie quería estar allí pero pienso que, en la mente de Hef, él pensaba que todavía tenía cuarenta y tantos años y, esas noches, la gente, la mansión, hacían más sólida esa idea. Él lo sentía: ‘Aún puedo". Los domingos tocaba, seguro, orgías, con 200 mujeres en la mansión, donde su dueño tomaba viagras sin parar, tanto que quedó sordo de un oído: "Hef siempre decía que prefería estar sordo y poder seguir practicando sexo. Raro", reveló.
La modelo conoció al Hugh cuando ella tenía apenas 21 años y solicitó una invitación para una fiesta de Halloween en la célebre casa, y fue aceptada. Y sin perder mucho tiempo llegaron al altar en la Nochevieja de 2012, cuando ella tenía 26 años y él 86, tras firmar un contrato prenupcial "de acero".
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Ella menciona que al llegar a la mansión Playboy quedó fascinada y se mudó enseguida. Dejó sus estudios de Psicología e inició su calvario. Pero fue la cercanía que tuvo el millonario con ella, lo que la hizo pensar que podía ser parte de su mundo tras venir de una familia rota.
"Dependes de la bondad de los otros y te haces chiquitita para poder encajar, no tienes poder. Cuando le conocí dije: ‘Vaya, podría pertenecer a esto’. Al principio, la mansión Playboy me pareció un santuario. No lo era. Pero o lo tomas o lo dejas, y yo no sentía que tuviera otro lugar donde ir o que pudiera hacer nada más".
Ahora que comienza a vivir su vida relata que se siente avergonzada de ver su pasado y asegura que en caso de haber tenido otra infancia no habría caído en esa vida.
"Todo lo que puedo decir es que si vienes de una infancia de cariño, feliz y perfecta, normalmente no acabas con alguien que tenía casi 60 años cuando naciste"... Es tan triste, parecía un bebé. Miro atrás y siento pena por esa chica. Eso iba a ser como ese momento de El mago de Oz donde la fantasía se desvanece, descubres la cortina y ves la realidad. Pero quien tiene el dinero crea las reglas, ¿no?", dijo.
Las claves
- Viuda de Hugh Hefner habló de lo que vivió a su lado.
- La modelo se mostró arrepentida de lo que vivió.
